Si eres un amante y un estudioso del café, e incluso si no lo eres y simplemente disfrutas de una buena taza de esta bebida, existe la posibilidad de que hayas escuchado que las máquinas de café espresso italianas son las mejores del mundo.
La razón es muy simple, y es que hablar de Italia es hablar de la cuna del espresso. De hecho, este tipo de café es tan parte de la cultura del país europeo que inclusive existe el Instituto Italiano del Espresso, cuyo fin es proteger la manera en que el italiano toma el café.
Para hablar del origen del espresso hay que remontarse a 1901, cuando el empresario italiano Luigi Bezzera creó una máquina que utilizaba la presión en el proceso de la elaboración del café, reduciendo con ello el tiempo de preparación. Como dato curioso, la principal motivación de Bezzera para idear esta máquina, fue lograr que sus trabajadores tardaran menor tiempo elaborando y tomando café, a cambio de trabajar más horas.
Así es como se dio el nacimiento de las cafeteras italianas espresso, las cuales además de su rapidez, sobresalieron desde un primer momento por el aroma en cada taza.
Mejorando la calidad
Bezzera decidió vender la patente de sus máquinas de café espresso italianas a Desidero Pavoni, quien se dio a la tarea de trabajar en la creación de mecanismos novedosos para mejorar el sabor. Para 1938, instaló su primera máquina espresso en el café Achille Gaggia, cuyo propietario, Gaggia, inició con la fabricación de la primera cafetera italiana espresso comercial a pistón en 1948.
La máquina de Gaggia ofrecía la posibilidad de crear una crema cuya textura era única. En la década de 1970 expandió su mercado al crear máquinas con características parecidas para uso doméstico.
Dicho esto, el café espresso no debe solamente su origen a Italia, sino también al desarrollo e innovación de las máquinas para prepararlo. Las últimas tendencias del mundo de las cafeteras profesionales, como las Elektra o la máquina de expresso La Marzocco se encuentran en este país, entregando un acabado perfecto.
Como apunte final, cabe señalar que las cafeteras italianas son las más usadas por los baristas top del mundo, quienes, con sus habilidades y dominio sobre estas máquinas, además del juego con distintos tipos de leches o licores, terminan preparando bebidas realmente únicas.