Marcas y modelos de cafeteras en el mercado hay bastantes. Pensando en ello y con el objetivo de ayudar a las personas a saber si en efecto su máquina para preparar café espresso es la mejor, nos dimos a la tarea de escribir esta entrada.
La respuesta, quizás bastante obvia, a la pregunta planteada es una: el café. El café que nos arroja una máquina de espresso es el que nos dirá si tenemos o no la mejor cafetera.
Sin embargo, la respuesta anterior produce a su vez una nueva duda: ¿cómo sé que el café de una máquina para preparar café espresso es bueno? ¿Qué distingue un buen café de “el mejor” café? ¿y de uno malo?
En realidad, no es una sola característica la que determina si tenemos un espresso de calidad o no. Se trata de todas las descripciones de las características físicas del café en general que podemos percibir con nuestros sentidos. Así, el sabor, la textura y el olor, son solo algunas de las propiedades organolépticas que nos dicen qué tan bueno es un espresso.
Contrario a la creencia popular, degustar un espresso va más allá de saborearlo. Implica conocer y reconocer los componentes de la bebida y comprender los porqués del sabor. Y por supuesto, disfrutarlo.
Crema
Tan solo hablando de la crema, ésta ha de ser ponderada por su color, textura y persistencia. La crema es, por decirlo de alguna forma, la garantía de que la preparación del espresso ha sido la apropiada.
Si la crema tiene un color oscuro, un agujero negro o un punto blanco en la mitad, significa que el espresso fue sobreextraído, es decir, debido a que el café fue molido muy fino, se requirió de mucho café para elaborarlo. Eso, o el tiempo de extracción fue mucho.
Color
Un color claro y no consistente nos señala que la extracción del café fue baja. Esto pudo deberse a un corto tiempo de extracción, situación que a su vez fue provocada por utilizar menos café del que se necesitaba, o bien, un grado de molienda más grueso que el requerido.
Aroma
En cuanto al aroma no hay mucho que decir, mas que aclarar que su intensidad y calidad deben ser tales que atrapen la atención desde un primer momento.
Cuerpo
Con el cuerpo, la boca luce como si estuviera llena de una capa cremosa, como una sensación de llenura. Por otra parte, el gusto se refiere al equilibrio conseguido entre los sabores, así como la armonía perfecta entre lo amargo y lo dulce.
Bien vale la pena puntualizar que el sabor característico de intensidad cambia dependiendo directamente no solamente del origen del café en grano, sino también del tamaño de la taza.
Como última característica nos encontramos con la persistencia del aroma, también conocido como after taste. Esto se consigue gracias a las microgotitas de aceite y líquido que se entrampan en la lengua, lo cual nos deja con el característico sabor del espresso hasta por unos 15 minutos luego de beberlo.
Ya que sabes todo esto, ¿sabes si tu máquina para preparar café espresso es realmente la mejor?